Teólogos UC participaron en el Congreso de Teología Sinodal de Latinoamérica y el Caribe

El encuentro organizado por el Equipo de reflexión teológica del Celam, liderado por el sacerdote argentino Carlos María Galli, tuvo como objetivo el impulsar una mayor comunión en el camino de la reflexión teológica católica latinoamericana y caribeña al servicio de una Iglesia sinodal y de un modo creativo y sinodal de hacer teología.

Por parte de la Conferencia Episcopal participaron el Arzobispo de Puerto Montt, Fernando Ramos; el obispo de Copiapó, Ricardo Morales; así como la secretaria general adjunta del Episcopado, Valeria López. La Facultad de Teología envió a su delegado el Prof. Fernando Verdugo y a los académicos Heriberto Cabrera, secretario adjunto pastoral de la CECh, y Rodrigo Polanco, quienes presentaron comunicaciones y expusieron respectivamente.

Además, desde Chile llegaron teólogos y teólogas de varias facultades y escuelas de teología y ciencias religiosas, como la U. Católica del Norte, la Pontificia U. Católica de Valparaíso, la U. de la Santísima Concepción, la U. Católica del Maule, la U. Católica de Temuco, la U. Alberto Hurtado, entre otras.

Durante una de las jornadas, el padre José Ignacio Fernández, asesor de la Pastoral de la Universidad Católica del Maule, hizo entrega a Mons. Lizardo Estrada, Secretario General del Celam; de un libro que reúne las ponencias de la primera versión del Seminario de Sinodalidad organizado por el Obispado de Talca y la UCM durante el año 2023. En dicho momento estuvieron presentes Mons. Fernando Ramos y Valeria López. La publicación, patrocinada por la Conferencia Episcopal, incluye las presentaciones del arzobispo Sergio Pérez de Arce, secretario general de la CECh, así como de Heriberto Cabrera y Valeria López. Dicha edición estará próximamente disponible en la Librería del Episcopado.

Caminar juntos aprendiendo unos de otros
Respecto de lo vivido en el Congreso, la secretaria general adjunta de la CECh relevó algunos aspectos:

En primer término la necesidad de “ir avanzando hacia la construcción de una definición o descripción de la sinodalidad que incorpore sus elementos esenciales, con los fundamentos y herramientas que nos entrega la teología desde distintas perspectivas”. Además, confirma que si la sinodalidad es un estilo, un modo de ser Iglesia en misión: “necesita, exige, materializarse en los vínculos y en las estructuras eclesiales, es decir poner de relieve la dimensión relacional y la dimensión institucional de la sinodalidad”.

Junto con ello, Valeria López destacó que el “compartir buenas prácticas sinodales (como tuvimos oportunidad de hacer en las mesas donde se presentaron comunicaciones), nos permite caminar juntos aprendiendo unos de otros, no solo a nivel personal sino también en la comunión entre iglesias particulares”.

Fernando Verdugo, valoró la instancia como una oportunidad para profundizar en la reflexión y en la concreción de propuestas para avanzar hacia aportes de la teología en la sinodalidad. “Destacaría de este congreso la pregunta ¿de qué manera la teología contribuye a este énfasis en una Iglesia sinodal que estamos buscando a nivel de las distintas regiones de nuestra Iglesia en diferentes partes del mundo? El aporte del congreso fue el cómo contribuye la teología en este proceso. Y lo interesante es que nos encontramos teólogas y teólogos, de distintos centros teológicos, facultades de teología de toda América Latina y, algunos invitados europeos, analizando el carácter sinodal de la Iglesia, el cómo está el pueblo de Dios, que quiere caminar con otro, apuntando a su servicio, a la humanidad, a la misión del Evangelio. También el reflexionar sobre el cómo la teología se ve llamada a cambiar su modo de hacer, su quehacer disciplinar, de modo que quede impregnada por este nuevo énfasis en el modo ser de la Iglesia, una Iglesia sinodal”.

Para Heriberto Cabrera esta fue una experiencia enriquecedora para todos. “Nos permitió reflexionar con otros. Tuvimos la presencia de personas de otros continentes. Tuvimos la oportunidad de compartir con colegas que, a veces uno conoce por nombre, pero que no ha tenido la oportunidad de conocer cara a cara; de poderlos conocer presencialmente, así que fue extremamente positivo. En cuanto contenido valoro la reflexión sobre el qué se entiende por sinodalidad; cómo se entiende en diferentes partes. Sobre el ¿cómo es esto del “Instrumentum Laboris” para la segunda sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que se realizará en octubre de este año y las líneas que hay, las opciones, sobre la sinodalidad”.

Agregó que tuvieron una gran acogida y destacó el método utilizado en el formato que privilegió las conferencias “lo que posibilitó que pudiéramos compartir y escucharnos entre todos”.

Rodrigo Polanco, destacó dos puntos principales. “La primera importancia que tiene es que Latinoamérica se está preparando bien para el Sínodo, que viene en octubre. Y lo segundo es que fue un encuentro teológico donde cada institución pudo aportar las reflexiones que había tenido en su propia Facultad o en su propio lugar de estudio de trabajo. Pudimos compartir sobre los desafíos que presenta la sinodalidad, de tal manera que estuvimos pensando sobre cómo hacer más operacional esta sinodalidad. A todos nos gusta ser más sinodales, pero necesitamos hacerlo en forma concreta. Entonces eso fue lo que hicimos en estos cuatro días muy intensos”.

En cuanto a la delegación de Teólogos UC, el Prof. Polanco señaló que eso habla muy bien de la Facultad, “porque los tres profesores fuimos por distintos motivos, como expositores o presentando comunicaciones. La Facultad está muy bien considerada. Mostramos que nuestra Facultad es muy activa en el concepto latinoamericano”, finalizó.