Juego de mesa ayudará a abordar la muerte en contextos escolares
Proyecto piloto de las facultades de Teología y Educación de la Pontificia Universidad Católica de Chile, busca acercar el tema de la muerte a estudiantes de Enseñanza Media, a través de la implementación del juego de mesa “Morituri”.
Un tablero, que incluye pistas de investigación, tarjetas con evidencia, testigos, y donde los jugadores son detectives contratados para resolver la muerte de una persona es la base del juego de mesa “Morituri”. Los participantes deben ir sacando sus tarjetas para ir configurando un relato que servirá, al final del juego, para que estudiantes y profesores tengan una profunda conversación sobre un tema que permanece tabú en nuestra sociedad contemporánea: la muerte.
En este juego de mesa no hay ganadores ni perdedores; es más bien una instancia o excusa para iniciar un diálogo sobre la muerte y así reflexionar sobre experiencias que generalmente la acompañan, tales como el miedo, el duelo, y el más allá.
El proyecto, desarrollado por los académicos Maili Ow y Guillermo Zamora de la facultad de Educación UC, y el académico Mario Inzulza de la facultad de Teología UC, se enmarca en una línea de investigación sobre la muerte en el contexto escolar. Esta incluye la indagación sobre los conceptos e imágenes que los padres usan para hablar de la muerte con sus hijos, o propuestas concretas de cómo hablar con niños y niñas pequeños sobre la muerte utilizando libros infantiles o textos bíblicos. Esta última investigación fue publicada a inicios de año en el libro “¿A dónde van los que mueren?”, el cual está disponible en versión digital en el sitio de Biblioteca Escolar Futuro.
Mario Inzulza asegura que la pandemia, los motivó a pensar el cómo desarrollar una metodología para abordar la muerte en contextos escolares, ya que la emergencia sanitaria hizo visible una experiencia que, si bien cotidiana, es vivida por casi todos los estudiantes durante su etapa escolar: la pérdida de un ser querido, o la muerte de algún miembro de la comunidad escolar.
Además, el académico insiste en la importancia de involucrar a la escuela en este proceso. A su juicio, existe una necesidad de avanzar en una investigación que ayude concretamente a la conversación y reflexión de la muerte, teniendo como punto de partida las experiencias, percepciones, actitudes y creencias concretas de los actores educativos. “Porque no es fácil hablar de la muerte, nos propusimos colaborar en esta conversación con instrumentos pedagógicos que, de manera directa y concreta, ayuden a elaborar las propias creencias y experiencias en torno al tema. Hablar de nuestros duelos o miedos, nos ayuda y hermana.”
Actualmente, el juego se está desarrollando en formato piloto en el colegio Alberto Blest Gana de San Ramón y su implementación durará un año. Los académicos esperan replicar esta experiencia en más establecimientos educacionales para seguir impactando positivamente y visibilizando la importancia de que las comunidades escolares, además de ofrecer un espacio seguro a sus miembros cuando alguien muere, construya relatos vitales donde la muerte y el sentido de la vida estén incluidos como parte de la formación de los estudiantes.
“La escuela debe incluir todas las experiencias humanas. Por eso la muerte no puede quedar fuera de la conversación y formación de los estudiantes. La escuela, junto a ayudar a contener situaciones dolorosas de sus miembros y poder hablar de ellos, debe preparar y anticipar la conversación sobre la muerte, integrándola en el proceso formativo. Es cierto que muchos profesores pueden sentirse incómodos o poco preparados para hablar del tema. Pero, ¿hay algo más importante que ayudar a uno de tus estudiantes a vivir bien, incluso en medio del dolor, la muerte de un ser querido? ¿Puede haber algo más significativamente formativo que esto?, no creo.”, concluye Maili Ow.
Te invitamos a leer la noticia que destaca El Mercurio sobre este interesante proyecto en el siguiente enlace.